En consulta, nos encontramos con muchos papis que nos escriben o llaman para comentarnos que no saben qué hacer con los pequeños de casa, y muchas veces nos preocupa mucho como ocupar su tiempo, pero para nosotras es fundamental también saber como llevan este momento emocionalmente.
Es importante saber que los niños y las niñas con como esponjas, a todos los niveles, tanto para aprender como a la hora de captar las cosas que se comentan a su alrededor.
Por ello, dejamos una serie de recomendaciones para poder tratar con ellos en estos momentos:
- Observar como se comportan. Saber si ha habido cambios en su comportamiento, si tienen momentos de rabietas, ... Esto solo lo detectaremos si observamos su comportamiento, no de forma obsesiva, pero si atendiendo y prestando atención. Muchas veces, en los niños y en las niñas aparecen comportamientos que los adultos interpretamos como enfado, pero que realmente son manifestaciones de tristeza, frustración o miedo. De esta manera, es interesante, antes de enfadarnos nosotros, quizás sea mejor investigar de donde vienen esos comportamientos.
- Indagar sobre lo que saben, lo que piensan sobre lo que está apsando, lo que vieron sobre el tema o lo que quieren saber. Conocer sus razonamientos, lo que le da miedo o preocupa. Eso nos ayudará a ayudarles.
- Escuchar. Para poder escuchar, debemos dar margen para ello. Es decir, debemos crear momentos para poder hablar tranquilamente, y muchas veces esto se hace de forma indirecta, mientras se juega a algo tranquilo, por ejemplo.
- Validar lo que nos cuentan. Cuando escuchamos, debemos hacerlo de forma activa y sin juzgar. Aunque haya cosas que nos puedan parecer cómicas, ridículas o raras, debemos aceptar lo que nos están contando, para crear un clima de tolerancia, aunque luego rebatamos sus ideas o demos argumentos alternativos.
- Reírse. Debemos saber que reírse es curativo. De esta manera, sonreír y buscar cosas que nos hagan reír juntos, va a ayudar tanto a pequeños como a mayores, y creará un clima positivo ante las noticias negativas que nos llegan día a día.
- Buscar cosas positivas. Tal y como decimos en el punto anterior, si echamos un vistazo a los medios de comunicación recibimos mayoritariamente noticias negativas y, además, esto se junta con que estamos en una realidad en la que nos salimos de casa y no tenemos demasiados estímulos, en comparación con la cantidad a la que estamos acostumbrados. De esta manera, puede llegar a parecer que un día es igual al anterior, y esto puede afectarnos al estado de ánimo. Una actividad recomendable es que antes de dormir, todos los días, busquemos alguna cosa positiva que haya tenido el día y también algo que nos propongamos para el día siguiente.
Esperamos que estas recomendaciones ayuden a que el día a día se haga más llevadero y a que nuestro estado de ánimo y el de los más peques sea el mejor posible.
Comments