Aunque siempre se nos ha transmitido la idea de que el amor es incondicional y de que cuando escogemos una pareja lo hacemos "para toda la vida", es vida siempre se divide en trabajo, salidas, deporte, ... En resumen, el amor es condicional y la vida en pareja es una parte de nuestra vida.
Pero, el coronavirus ha cambiado las reglas de nuestro juego, y esto hace que muchas parejas convivan 24 horas encerradas en casa solos, o, con sus pequeños y pequeñas. Esto puede hacer que la pareja se vea tocada e ese amor condicional se ponga en "condiciones dificultosas", ya que esta cuarentena hace que no existan momentos de liberación, por convivencia forzosa.
De esta manera, vamos a dejar una serie de consejos prácticos para sobrellevar el confinamiento, que está durando un pelín más de lo esperado:
1. Limita las conversaciones sobre el coronavirus. Aunque mantenerse informado es bueno, debemos limitar la información y que esta sea la que proviene de fuentes confiables, y, sobre todo, no debemos estar todo el día viendo o leyendo sobre el Covid-19, y esto se amplia a las conversaciones cotidianas. La pandemia no puede ser el centro de nuestras conversaciones. Por ello, debemos mantener conversaciones de calidad con nuestra pareja e intentar conocernos de verdad, y esto lo podemos hacer con ronda de preguntas, que vayan desde cuales son sus metas profesionales hasta qué animal le gustaría ser.
2. Mantener la paciencia y la armonía. Como estamos muchas horas y muchos días juntos, las probabilidades de tener un mal día aumentan. Por lo tanto, vamos a intentar trabajar por un buen ambiente casero. Si tenemos un mal día, avisaremos e intentaremos hacer cosas que nos mejoren el estado de ánimo, y si es la otra persona la que está en un día más negativo, intentaremos mantener la calma, aportar tranquilidad e incluso dejarle su espacio.
3. Distribución equitativa de las tareas. Generalmente, las tareas de casa están distribuidas de una determinadamente. Sin embargo, esta situación ha cambiado todas nuestras rutinas. Se crean tareas extra que en la vida "normal" no existen, otras han aumentado y otras, sobre todo las externas y de recados, han desaparecido. Por lo tanto, hay que redistribuir las tareas, y quizás para muchos asumir un rol más activo de cuidado, bienestar o, incluso, de educación de los menores.
4. Hacer cosas que nos gusten. Debemos buscar nuestro momento diario para hacer deporte en casa, juegos en pareja o familia, ... Tenemos mucho tiempo y estamos siempre en el mismo sitio, por lo que nuestra imaginación debe ser la que nos ayude (noche de juegos, tarde de deporte, el día de la comedia, ...) La risa es terapéutica, y debemos generarla.
5. Momentos para uno mismo. A pesar de estar todo el tiempo en el mismo lugar y juntos, es importante que cada uno tenga su libertad y su espacio. Es bueno que cada uno tenga un espacio personal e ítimo, para evitar la sobrecarga. Es necesario para relajarse, desconectar, pensar en nuestras cosas, o quizás para dormir la siesta. Pero debemos sentir que tenemos la libertad para hacer lo que queramos.
6. Recordar el romanticismo. Al estar siempre en casa, y sin obligación de salir al trabajo, a hacer recados o a realizar actividades de ocio, la tendencia es a no cuidarnos demasiado y a pensar que ya estamos todo el tiempo con nuestra pareja, por lo que no es necesario prepararnos ni hacer cosas especiales. Pero pasa justo lo opuesto. En este tipo de situaciones es cuando más tenemos que cuidar nuestra pareja. Es importante fijar ciertas citas de pareja, proponer masajes, jugar a los desconocidos, ... De nuevo, en esta situación la imaginación es la reina.
Y lo más importante, debemos recordar por qué estamos con la persona que tenemos al lado. Si tenemos dudas, podemos hacer un diario de cosas buenas que el otro hace por nosotros.
Porque, aunque siempre pensamos en que debemos sobrevivir como pareja a esta situación, este momento también puede ser un buen momento para descubrir si realmente queremos estar con el que está sentado a nuestra lado en el sofá o si realmente no es el acompañante que queremos tener en nuestra vida.
Lo más importante es querernos a nosotros mismos y que nuestra pareja nos aporte, nos sume.
¡Mucho ánimo y mucho aprendizaje!
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